Fotografía: Cristina Figueras-Puig IRB Barcelona
El tiempo en que se producen las metástasis en el cáncer de mama (lesiones secundarias originadas a partir de células diseminadas del tumor original) varía mucho en cada paciente y se conocen poco los mecanismos que gobiernan la latencia (el estado durmiente de células ya esparcidas).
Un trabajo liderado por el Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona), en el laboratorio dirigido por Roger Gomis, ha identificado genes involucrados en el estadio latente asintomático de las metástasis del cáncer de mama.
El trabajo publicado recientemente en Nature Cell Biology, permite comprender a nivel molecular cómo la pérdida de expresión de determinados genes facilita la expansión de las lesiones metastásicas.
El equipo ha analizado el tipo más frecuente de tumor de mama, el estrógeno positivo (ER+) que representa 80 por ciento de los casos de tumores de mama, y que se caracteriza por un largo periodo de latencia con ausencia de síntomas.
El grupo de investigación identificó la proteína quinasa MSK1 como un regulador importante de las metástasis durmientes o latentes, y han confirmado que los tumores de cáncer de mama ER+ que no expresan MSK1 se asocian a un riesgo de recurrencia más anticipado, mientras que aquellos que la expresan harán metástasis más tarde.